Cristina, de 51 años, pide ayuda para seguir viviendo tras quedarse sin la colaboración regional para la compra de viagra, el medicamento que consume desde hace 14 años.
Padeced desde el 2013 una hipertensión pulmonar primaria que tiene en este vasodilatador la única alternativa para mantener activos sus órganos comprometidos.
Desde hace tres meses el hospital de Quilpué suministraba el medicamento, pero fue interrumpido generando un grave problema económico para la afectada.
"Hasta ahora he podido solventar mi situación, pero la vida y la situación es más cara, por eso hago un llamado a preocuparse de este tema", dijo la mujer que vive con una pensión de invalidez.
Ante el pedido de ayuda, las autoridades locales analizan la posibilidad de ayudar a Cristina a financiar parte del tratamiento.