El diario estadounidense The New York Times publicó una columna de opinión en donde destaca la aprobación en nuestro país de la ley que despenaliza el aborto bajo tres causales. El artículo se titula "Cómo Chile hizo para terminar con su draconina prohibición de aborto", y fue escrito por el director de la División de las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, junto a la abogada Verónica Undurraga, profesora de derecho constitucional en la Universidad Adolfo Ibáñez.
En el texto, los autores repasan la serie de obstáculos qur tuvo que sortear el proyecto para convertirse en ley. Entre las principales definiciones de la publicación se señala que la iniciativa, propuesta por la Presidenta Michelle Bachelet en 2015, "fue una victoria notable puesto que Chile tenía una de las legislaciones más duras sobre aborto en todo el mundo".
De igual forma, Vivanco y Undurraga apuntan que el proyecto pasó por encima de las dificultades legislativas pese a que "la victoria parecía improbable".
Además, en el escrito se establece que el Tribunal Constitucional rechazó las demandas de "los conservadores" que se oponían, liderados por la Iglesia Católica.
El articulo toma el caso de Chile como ejemplo para otras naciones como "El Salvador, Haití, Honduras, Nicaragua, República Dominicana y Surinam", haciendo así un llamado a que reexaminen su "cruel, perniciosa y regresiva" política sobre el aborto, considerando la alta tasa de mortalidad de mujeres que se someten a interrupciones voluntarias del embarazo.
Por otro lado, los autores abordan la discusión en torno al momento en que se considera que comienza la vida. Sobre aquel punto, el escrito dice que, "reconocimos el valor de la vida prenatal, pero sostuvimos que penalizar el aborto en todos los supuestos es una medida efectista aunque ineficaz para impedir abortos, a diferencia de otras medidas que atienden las necesidades de las mujeres, como ofrecer guarderías y prevenir la violencia de género", señalan los autores.
Otra arista abordada son antecedentes como la oportunidad en que el Tribunal Constitucional prohibió en 2008 la anticoncepción de emergencia y que la Constitución de Chile, como la de muchos otros países, ordena que se proteja la vida.
Por último, el artículo del NYT reconoce que "todavía queda mucho por hacer" ya que la mujer todavía enfrenta obstáculos "indebidos" para acceder al aborto legal.