La Presidenta Michelle Bachelet dio inicio al proceso de discusión sobre una ley de matrimonio igualitario en Chile, en el marco del acto público de solución amistosa entre el Estado y representantes de las reivindicaciones de los derechos LGBT en Chile, realizado este viernes en La Moneda.
"Nos comprometemos como Estado a impulsar una discusión pública y generar un proyecto satisfactorio de matrimonio igualitario. Esta es una demanda legítima de la sociedad chilena; el 60% de los compatriotas respalda el matrimonio homosexual", sostuvo la Mandataria.
Además, destacó los avances legales en ese aspecto realizados hasta ahora. "Chile por fin logró dar reconocimiento jurídico, protección y dignidad a familias que conviven sin estar casadas, sea de igual o distinto sexo, y ha beneficiado a cerca de 20 mil compatriotas. Un 23% de ellos corresponde a parejas del mismo sexo. Gracias a esa ley saldamos una deuda con aquellos que, por no querer o poder casarse, estaban privados de prestaciones básicas de salud, previsión o herencia. Hoy quienes conviven pueden optar comunión de bienes, ser carga uno del otro, herederos uno del otro. Hoy, en suma, se reconocen derechos esenciales", planteó.
Además, la Jefa de Estado afirmó que "nos hemos comprometido a medidas como reformular el programa de salud sexual y reproductiva del Ministerio de Salud. Estamos elaborando una política interministerial de estrategia de sexualidad, afectividad y género, y enviaremos al Congreso un proyecto de ley para promover la igualdad y sancionar la discriminación e incitación al odio en base a nacionalidad, etnia, sexo, orientación sexual".
"Si bien la Ley Zamudio fue un avance, hay que rellenar vacíos", concluyó la Presidenta, en un acto cuyo origen se remonta a 2012.
En ese año, una pareja del mismo sexo se dirigió al Registro Civil con la intención de casarse y el derecho fue negado. Por eso, denunciaron al Estado a la Corte Interamericana de Derechos Humanos y, a partir de entonces, comenzó una serie de reuniones para llegar a un acuerdo que, entre otras cosas, contemplaba este acto público para iniciar la discusión respecto al matrimonio homosexual.