Por el delito de parricidio fue formalizada este martes Rossana Valdés Caro, la comerciante ambulante de Molina quien se entregó a la justicia luego de asesinar y descuartizar a su pareja, identificada como Claudio Muñoz Ramírez, de 43 años.
En la audiencia de formalización, la fiscal jefe de Molina, Mónica Barrientos, reveló que "viajó a Talca con restos de la víctima en su auto".
Agregó, además, que la imputada "quería botarlos (los restos), pero regresó con ellos a Molina".
Tras exponer sus argumentos, la fiscalía pidió prisión preventiva para Valdés, petición que fue concedida por el Tribunal de Molina, que determinó un plazo de dos meses para la investigación.
Rossana Valdés se entregó a la justicia tras asesinar de un tiro a su pareja y luego cortarle sus extremidades.
En parte de su declaración, que fue publicada por el diario La Tercera¸ la llamada "descuartizadora de Molina" dijo que "saqué los restos y dejé las extremidades en unas fuentes de plástico y cuando se enfriaron las empecé a embolsar".
Agregó, además, que "pensé en deshacerme de él pero no me lo podía, subí al auto todos los restos, que como dije, iban dentro de unas bolsas. Se me ocurrió ir a enterrarlos, anduve el domingo en la mañana por Santa Lucía, fui a Talca, pero no tuve el valor y me devolví. Dejé el auto en la casa, de ahí me fui a Sarmiento y le conté a mi hermano (…) que Claudio se había ido con los $ 5 millones y que había desaparecido, aunque sentía unas ganas terribles de decirle que lo había matado".
La defensa de Valdés Caro, sostiene que la imputada sufrió maltratos psicológicos de parte de su pareja, a quién asesinó de sólo un tiro, por lo que, también, descartan ensañamiento en el crimen.
Fotos: Agencia Uno