Tras la aparición del cuerpo de Marta Peña Zamorano, quien fue descuartizada y calcinada en San Miguel, nuevos antecedentes comienzan a aparecer.
Su pareja, Isack Martínez, descartó cualquier hecho de violencia en la relación, pese a que muchos vecinos y amigos denunciaron lo contrario.
“La última vez que vino para acá, la tuvo secuestrada, llegó a mi casa 'morada'”, confesó uno de los testigos.
Sin embargo, una nueva arista comienza aparecer. Se trata de Luis, ex compañero de trabajo de Peña, con quien Marta Peña pudo mantener una relación paralela.
“Ella venía toda machucada, con quemaduras de cigarros, con los brazos cortados”, dice.
“Ella tenía miedo, no podía salir tranquila porque el marido la buscaba en todos lados”, agrega.
Por su parte, Patricio Peña, padre de la víctima, retiró los restos de su hija desde el Servicio Médico Legal (SML).