En el año 2000, Chistian y Carmen se conocieron en España. Se enamoraron y cinco años después contrajeron matrimonio.
Al tiempo nació su única hija y al año de su nacimiento, la pareja conformada por el español y la chilena, se separaron. Aunque lograron un divorcio en común acuerdo, las cosas no comenzaron a marchar de forma pacífica.
Dada la buena relación que ambos tuvieron a pesar de separarse, Cristian Garralaga firmó un permiso con el que Carmen Ferrada podía sacar a la niña dos veces al año de España. Lo que no se esperaba era que su ex esposa la traería a Chile y tres días después de ello, lo demandaría por abuso sexual. Después, él la demandaría por secuestro.
Se inició una investigación y al término de ella se concluyó que la niña no poseía signos físicos ni psíquicos de un abuso sexual. Tras ello, comenzó la demanda por secuestro, la que después de meses ganaría Christian.
Según la justicia española el padre tiene más condiciones para quedarse con la tuición de la menor, pero ello no era suficiente para que se confirmara el fallo.
La Justicia Chilena debía ratificar el veredicto y, así fue. La Corte Suprema le otorgó la tuición al padre, quedando la madre sólo con derecho a visita. A pesar de ello, Christian hace seis años que no ve a la menor.
Pero este caso no es aislado. Revisa el reportaje completo.