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Así era el primer depredador gigante de la Tierra

Hallan en el río Iowa, Estados Unidos, los restos del primer gran depredador del planeta: un agresivo monstruo marino que dominaba los océanos. Te contamos cómo es.

24horas Administrator

Miércoles 2 de septiembre de 2015

El primer gran depredador del planeta era un escorpión marino gigantesco que dominó los mares hace cerca de medio millón de años.

Según se desprende de los restos fósiles encontrados en el lecho del tramo superior del río Iowa, en Estados Unidos, esta curiosa criatura medía 1,70 metros, tenía una docena de garras que le salían de la cabeza y una cola que le permitía impulsarse bajo el agua.

Los fragmentos –más de 150– fueron encontrados bajo las aguas del río, en el cráter dejado por un meteorito que antiguamente estaba cubierto por el mar.

El hallazgo fue publicado en la revista BMC Evolutionary Biology.

De acuerdo a los autores del estudio, este monstruo marino pertenece a una especie a la que denominaron Pentecopterus decorahensis , en honor a un antiguo barco de guerra griego cuya forma y comportamiento son similares a las de este animal.

Animal "único"

El Pentecopterus habitó nuestro planeta hace 467 millones de años.

Es la especie más antigua conocida de euriptérido, unos depredadores extintos que, aunque se parecían a los cangrejos o las langostas, están relacionados con los arácnidos modernos.

A diferencia de los escorpiones de tierra, este animal no utilizaba su cola como aguijón sino que le servía para nadar y mantener el equilibrio.

"Esta nueva especie es increíblemente extraña. La forma de su paleta –la pata que usaba para nadar– es única, como lo es la forma de su cabeza", señaló James Lamsdell, investigador de la Universidad de Yale, en EE.UU., y autor principal del estudio.

"También es muy grande: más de un metro y medio de largo", agregó el investigador.

Y si bien es cierto que había otros escorpiones marinos de mayor tamaño en la misma época, aquellos se alimentaban de lo que hallaban en el fondo del mar y no eran los depredadores dominantes, explicó Lamsdell.

Bicho agresivo

Los restos fosilizados del animal no son huesos, ya que los Pentecopterus no son vertebrados.

Lo que se encontró fueron restos de exoesqueletos en un excelente estado de conservación.

 

El análisis de estos restos permitió a los investigadores recrear la forma y el movimiento del animal.

"Pudimos ver cómo las patas se articulan la una con la otra y cómo se habría movido", dijo Lamsdell. "Se ven también muchos puntos de inserción de pelos".

La forma de sus brazos que salen desde la cabeza revela también como esta criatura agarraba a su presa y la empujaba hacia su boca.

"Obviamente era un animal muy agresivo", concluye el investigador. "Era un bicho enojado muy grande".