El presidente chipriota, Nicos Anastasiades, designó a un panel de jueces para investigar qué fue lo que llevó al país al borde de la bancarrota y de salir de la eurozona, antes de ser forzado a aceptar estrictas condiciones para su rescate.
El mandatario pidió a los jueces investigar a fondo tanto a él como a su familia tras las acusaciones de que empresarios e individuos bien relacionados habían retirado sus fondos de Chipre días antes de que el plan fuera hecho público y de que los ahorristas perdieran parte de su dinero, lo cual formaba parte del rescate financiero.
El presidente indicó que los responsables del manejo de la economía y el sistema bancario del país había cometido una serie de errores.