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El verdadero impacto de una mastectomía

Más de cien hombres y mujer afectados por cáncer de mama han posado semidesnudos para el fotógrafo de moda David Jay. Vea las fotos de su proyecto The Scar, con que busca crear conciencia sobre el impacto de la enfermedad.

24Horas.cl TVN

Miércoles 3 de julio de 2013

“Supongo que como fotógrafo, tomar fotos es mi forma de lidiar con las cosas que veo de la gente que amo”, le cuenta a BBC Mundo el fotógrafo de moda David Jay quien desde hace siete años fotografía a mujeres jóvenes que han tenido que someterse a una mastectomía por cáncer de mama.

 

Paulina (en la foto superior) ya había posado para Jay. Y cuando a sus 29 años le diagnosticaron cáncer de mama, éste sintió la necesidad de volverla a tener delante de su lente para que mostrara su cicatriz. Ella fue la primera de algo que tiempo después se convertiría en el proyecto The Scar.

 

Tras fotografiar a Paulina ella le sugirió retratar a las otras chicas, también veinteañeras, con quienes hacía quimioterapia. “Me dijo que como fotógrafo y como hombre sería una experiencia interesante al mismo tiempo que ellas obtendrían algo del proceso”.

 

Fue hace tres años que Sarah Boghdan recibió el impacto del diagnóstico de cáncer. Entonces tenía 36 años y esta mujer con parálisis cerebral encontró fuerzas para superar la mastectomía y posterior quimioterapia viendo las fotos de las mujeres que habían posado para The Scar. Tras superar el tratamiento se puso en contacto con Jay a quien le escribió que las mujeres en sillas de ruedas "también tenemos cáncer”. Me reía porque estaba agradecida de haber sobrevivido. Nunca me había mostrado a un hombre de ninguna manera, en ningún grado de desnudo, excepto por mi doctor”, le contó a BBC Mundo.

 

Siete años después de esa primera foto a una amiga, David Jay ha retratado a más de cien mujeres y hombres con la cicatriz del cáncer. “He financiado todo el proyecto de mi bolsillo, porque con frecuencia siento que si recibes dinero, la integridad del mensaje queda comprometido”.

 

Recientemente, estas imágenes fueron parte de una polémica con Facebook debido a que la red social no permite, como muchos otros medios, publicar nudismo. “Pero Facebook siempre ha permitido subir fotos de mastectomía, el problema es el pezón de la mujer”, aclara Jay. “En la medida que la mujer no tiene pezón, puede aparecer desnuda en la imagen”.

 

Con los hombres no hay problema. Ellos pueden aparecer con el pezón. Oliver Bogler forma parte de ese 1% de los pacientes de cáncer de mama que pertenecen al género masculino. “Decidí ponerme en contacto con Jay porque sentí una conexión emocional muy importante”, le dice a BBC Mundo. “Mucho de la campaña contra el cáncer es este lazo rosado que muestra a gente feliz (…) y en realidad no es así para muchos pacientes con cáncer. “Es un camino largo y duro que no siempre tiene un final feliz”. Este será el primer verano de Bogler tras la mastectomía y si bien no pasa nada que un hombre vaya sin camisa, él piensa usar una franela para cubrirse la cicatriz.

 

Eliza Hewitt fue diagnosticada cuando tenía 22 años. Una semana después debían hacerle una doble mastectomía. “Así que la noche antes de la operación pensé que si iba a vivir con esto, tenía que saber cómo se veía. Al principio sólo encontré a mujeres mayores de 50 años en internet, hasta que me topé con The Scar. Me dio mucha paz saber que hay una fuerte comunidad de mujeres a las que me podía relacionar”, le explica a BBC Mundo. “Es muy difícil mirar tu cuerpo después de una cirugía como ésta, así que posé por mí, para ver si esto me ayudaría a mejorar cómo me veía”. Desde que publicaron su imagen, ha recibido infinidad de mensajes de agradecimiento de otras mujeres que pasan por lo mismo.

 

“Rara vez se expone la realidad del sufrimiento humano”, señala el fotógrafo, quien agrega que muchas veces los medios y las redes sociales prefieren retirar una foto con un pecho “antes que mostrar la realidad a la gente. Les atemoriza más el seno que no está afectado que la cicatriz”. El objetivo final de David Jay es “cambiar las emociones de todos nosotros para que podamos comprometernos de una forma distinta”.