BBC Mundo
La piscina de clavados de Río 2016 se tiñó de verde este martes.
Fue uno de los acontecimientos -y misterios- olímpicos que más llamó la atención en los últimos días.
El agua de la piscina de clavados de Río de Janeiro se había teñido de verde y, hasta hace poco, nadie sabía por qué.
Finalmente los organizadores dieron con la respuesta: el inusual color verdoso se debía a la alcalinidad del agua, pues los tanques se habían quedado sin ciertos químicos, disparando los niveles de acidez (ph), dijo la Federación Internacional de Natación (FINA, por sus siglas en inglés).
Y aunque el jefe del equipo canadiense de calvados, Mitch Geller, descartó que la extraña coloración fuera tóxica, admitió que no era lo ideal.
Los organizadores apuntaron a problemas de filtración.
Pero, luego de las quejas de algunos nadadores sobre el mal olor, la piscina ha sido cerrada (aunque los motivos aún no están claros).
Los organizadores de Río 2016 dijeron que los entrenamientos fueron cancelados para "devolver al agua su color azul".
El clavadista británico Tom Daley -precisamente uno de los primeros en denunciar el color verdoso de la piscina- hizo comentarios al respecto.
"La piscina está cerrada esta mañana. Esperemos que no hayamos estado sumergiéndonos en algo demasiado malo estos últimos días", escribió Daley este viernes en su cuenta de Twitter.
"Proceso de limpieza"
El comité organizador explicó en un comunicado que los atletas podrían realizar el entrenamiento "en seco" en la sección de la sede con trampolines, plataformas y arneses.
Fuentes del comité le dijeron a la BBC que el color del agua "tardará tiempo en ser reparado completamente", pero que "las condiciones están mejorando".
"La parte inferior de las baldosas se ensució mucho y estamos ejecutando el proceso de limpieza. Y el agua está siendo tratada y filtrada", agregaron.
También recalcaron que "no hay riesgo para los atletas y que el color (del agua) es mejor que el del día anterior".
Los organizadores siguen intentando resolver la situación, con la esperanza de devolver al agua su color azulado.
Mario Andrada, vocero del Comité Organizador, dijo que la piscina quedará cerrada para "resolver de una vez por todas el problema", aunque no especificó por cuanto tiempo.