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Papa Francisco se despide de Chile con una plegaria por la "unidad y paz" del país

Al cerrar la misa que ofició en Iquique, el sumo pontífice tuvo palabras especiales dedicadas a autoridades, voluntarios y fieles que lo acompañaron en las actividades.

Daniela Toro

Miércoles 31 de diciembre de 1969

La tarde de este jueves, el Papa Francisco dio término a su tercera misa masiva en nuestro país, instancia en que aprovechó de despedirse de Chile con palabras dedicadas tanto a las autoridades como a los fieles que lo acompañaron durante estos últimos tres días.

En la instancia, dio lectura a una carta de agradecimiento encabezada por el nombre de la Presidenta Michelle Bachelet, de quien destacó "su invitación a visitar el país", además de las autoridades civiles y funcionarios "que con profesionalidad ayudaron a que todos pudiéramos disfrutar de este tiempo de encuentro".

Además, mencionó a los más de 20 mil voluntarios que participaron en el desarrollo de las tres jornadas que "sin su empeño y colaboración hubiesen faltado las tinajas con agua para que el Señor hiciera posible el milagro del vino de la alegría".

El Papa también destacó el sacrificio de todos quienes peregrinaron para participar en los encuentros, manifestando que "lo valoro y lo agradezco de corazón", palabras que hizo extensivas a los miembros de la comisión organizadora.

También se refirió a su próximo destino destacando que ahora "sigo mi peregrinación hacia Perú, pueblo amigo y hermano de esta patria grande, que estamos invitados a cuidar y a defender". Francisco además hizo una plegaria a Dios pidiendo que mire "la fe de este pueblo" y que le regale "unidad y paz".

Finalmente, agradeció "la presencia de tantos peregrinos, de los pueblos hermanos de Bolivia y Perú, y no se pongan celosos... especialmente a mis hermanos argentinos, que son mi patria".