El gobierno de Cuba prohibió el ingreso de la ex ministra de Educación, Mariana Aylwin, quien pretendía viajar para recibir un premio en nombre de su padre por parte de una organización opositora.
Respecto a esta situación, la Democracia Cristiana, partido al que pertenece Aylwin, emitió una declaración pública en la que condena la medida y pide a la Cancillería "elevar ante el régimen cubano su formal protesta rechazando tan repudiable conducta".
A través de la declaración también expresaron que la prohibición es "impropia entre dos estados que mantienen relaciones diplomáticas y consulares y vulnera los principios de la Carta Democrática Interamericana , los principios democráticos y los Derechos Humanos que constituyen la centralidad de la dignidad humana y del Humanismo Cristiano.".
En el documento también se indica que el partido "formula fervientes votos por la recuperación de la democracia, la libertad y el respeto de los Derechos Humanos en Cuba y en América Latina como valores universales que deben preservarse en todo tiempo y lugar".
Desde el gobierno indicaron que se le hará presente a las autoridades cubanas su malestar por esta acción y llamará a informar al embajador de Chile en La Habana.