Por Claudia del Solar y Mariela Aravena
La negativa del Desafío Levantemos Chile a sacrificar su nombre y marca en aras de la coalición de centro derecha vetó antes de nacer el nombre propuesto por el presidenciable, Sebastián Piñera. “Levantamos” era una de las alternativas que se analizaban para designar a la actual Alianza por Chile, una idea de Sebastián Piñera que le había parecido bien a moros y cristianos en la centro derecha, aunque esta mañana –tras el reclamo de la Fundación ligada a Felipe Cubillos, que la consideró una idea “improcedente y oportunista“- casi todos coincidieron en que era “una alternativa más”.
Con toda claridad y a través de una declaración pública de su Directorio, la fundación rechazó la idea de de algunos partidos y movimientos políticos de utilizar para su nuevo referente el nombre “Levantemos” y en su gráfica incorporar “Levantemos Chile” y solicitó “no utilizar nuestro nombre, ya que esto afectará la imagen independiente y apolítica de Desafío Levantemos Chile y limitará nuestra capacidad para seguir apoyando a tantos compatriotas”.
Y aclaró la entidad que “Desafío Levantemos Chile es una marca registrada”; que “nuestra fundación no es política, religiosa ni pretende cumplir esos roles en nuestra sociedad” y que “usar un nombre y logo similar al de Desafío Levantemos Chile “nos parece improcedente y oportunista, considerando el prestigio ganado por nuestra fundación apoyando a miles de compatriotas en terreno sin importar su color político o credo religioso”.
El reclamo del Desafío Levantamos Chile” no es banal. Detrás de su rechazo está el temor de que se contamine su marca “apolítica con una determinada opción política y, adicionalmente, la Fundación utiliza ese nombre para su OTEC, su página web e incluso para recaudar dinero a través de medios electrónicos.
Por lo mismo, en la Alianza se apresuraron a insistir en que no fue idea de los partidos y que es sólo una propuesta más que se analiza. “Hemos sabido por el diario de esto, no hemos recibido una propuesta concreta de nombre, nos enteramos por la prensa de esta proposición que nos parece una idea interesante, pero estamos en un proceso y esa propuesta y otras que puedan surgir más las que hay en estudio nos darán oportunamente la propuesta de nombre que le comunicaremos al país”, dijo el timonel de la UDI, Hernán Larraín.
En tanto Alejandra Bravo, presidenta del PRI, que había sido una entusiasta partidaria del nombre Levantemos, reconoció que ese nombre se dio a conocer desde el entorno del ex Presidente Sebastián Piñera y que “nos parece un nombre creativo y que efectivamente está en la línea de lo que hoy está ocurriendo en Chile, pero como nuevo referente queremos escuchar muchas ideas y sobre todo a los expertos en marketing”, dijo esta mañana.
Sobre el Desafío Levantemos Chile, dijo que sus críticas son válidas, pero insistió en que “no es una idea que haya nacido de nosotros como nuevo referente, aunque son bienvenidas todas las ideas sobre este nuevo referente político.”.
Añadió, en todo caso, que a mediados de octubre tendrán un nombre que represente el momento político que Chile está viviendo para poder reflejar en él lo que quiere el país.
Piñera en el origen
Hace algunas semanas, la Alianza se amplió oficialmente. A sus partidos fundadores, Renovación Nacional y la UDI, se unieron fuerzas escindidas de otros partidos, como el PRI –cuyo origen son los partidarios del fallecido senador DC Adolfo Zaldívar- y Evópoli, formada por ex funcionarios del gobierno de Sebastián Piñera que eran independientes o no se sentían ya cómodos en sus partidos de origen.
Junto con reuniones de coordinación para una lista municipal común, un programa y una estructura, comenzaron las ideas para el nombre del ampliado referente. Varios saltaron a la mesa, pero el único que trascendió fue “Levantemos”, ideado por Sebastián Piñera y que ya había sido usado en otras ocasiones: en febrero de 2010, tras ser elegido Presidente y a pocas horas de que el terremoto de 8.8 grados azotará el centro-sur del país, utilizó el nombre para lanzar el plan de reconstrucción del país, y luego, en abril, le añadió el “Mujer, Levantemos Chile” para englobar diez medidas que favorecían especialmente a jefas de hogar afectadas por el fuerte sismo.
El nombre generó un rápido consenso en la Nueva Alianza. El primero en aprobarlo fue Andrés Allamand, curiosamente casado con Marcela Cubillos, ex diputada UDI y hermana de Felipe Cubillos. “Simpaticé con la idea del Levantemos Chile de Sebastián Piñera para incorporar a la oposición a todo aquello que esté a la derecha de la retroexcavadora, es decir, todo aquello que no sea Nueva Mayoría", había señalado en Cooperativa.
Los presidentes de partidos y movimientos del conglomerado también estaban de acuerdo en las características positivas del nombre. E incluso trascendió que los timoneles y publicistas del sector estaban trabajando en gráficas que pudieran representar ese concepto, detrás del cual estaba la idea de que la nueva alianza podría levantar al país. Cautos, Cristián Monckeberg y Hernán Larraín dijeron en su momento que todas las ideas se revisarían; en tanto, Felipe Kast (Evópoli) y Alejandra Bravo (PRI) fueron más entusiastas y señalaron que “Levantamos” tenía la virtud de aludir al concepto levantar Chile tras el paso de la Nueva Mayoría.
Desde la Fundación Avanza Chile, donde se ha aglutinado el núcleo duro de Piñera, el ex ministro del Interior, Andrés Chadwick, aludió más al problema legal que al comunicacional de utilizar el nombre, al señalar que ojalá no hubiera impedimentos legales para ello.
En todo caso, la propuesta final no estaba decidida. Tal como dijo hoy Hernán Larraín, la decisión se iba a tomar en octubre o noviembre.
Aún así, Tregua –empresa de propiedad del hijo de Andrés Chadwick- ha inscrito en internet cuatro dominios que contienen la palabra Levantemos: levantemoschile.cl; levantemos.cl; levantamos2017.cl y redlevantemos.cl. Avanza Chile, la Fundación de Piñera, parece haber inscrito mediante su jefa de comunicaciones el dominio chilelevantemos.cl en Nic Chile.
Identidad
El conglomerado de centro derecha ha tenido varios nombres durante su historia, y también varios integrantes, aunque la base siempre han sido Renovación Nacional y la UDI.
Del 89 al 92, luego de la separación de la derecha en dos partidos, RN y la UDI, se llamó Democracia y Progreso. Su candidato presidencial fue Hernán Büchi.
Del 92 al 93 ambos partidos más el Partido Nacional formaron Participación y Progreso.
Una vida más larga, pero con varios cambios de integrantes, tuvo la Unión por el Progreso de Chile, entre el 93 y el 96. Desde 1993 hasta el 94 la formaron RN, la UDI, el PN, el Partido del Sur de Eduardo Díaz y la Unión de Centro Centro de Francisco Javier Errázuriz. El 94 el Partido Nacional se fusionó con la UCC y saló de la coalición de derecha, y el 94, tras las elecciones parlamentarias, el Partido del Sur se disolvió al no haber logrado cupos en el Congreso, de lo que culpó a sus partidos aliados.
Del 96 al 99 se conformó la Unión por Chile, con la UDI, RN y el Partido del Sur, que se incluyó en la alianza y esta vez sí obtuvo un diputado –el hijo del fundador, Eduardo Díaz del Río-, pero al no lograr el porcentaje de votos requerido a nivel nacional fue disuelto.
El nombre de Alianza ha sido el pegamento que más tiempo a unido a RN y la UDI. Del 99 al 2004 se llamó Alianza por Chile y del 2004 al 2009, solo Alianza. En 2009 pasó a llamarse Coalición por el Cambio, al incluir previo a las presidenciales que le dieron el triunfo a Sebastián Piñera, a ChilePrimero. Ese partido, cuyos fundadores eran Fernando Flores, ex ministro de Salvador Allende, y Jorge Schaulsohh, ex presidente del PPD, acompañó al conglomerado hasta el año siguiente y tuvo participación en el gobierno. El partido fue disuelto en 2010, al no obtener los votos necesarios para mantenerse inscrito. De ese tronco viene el actual diputado independiente Vlado Mirosevic.
Pese a la salida de ChilePrimero en 2010, la Coalición por el Cambio mantuvo su nombre hasta el 2012 y luego, solo hasta el 2013, lo acortó a Coalición. Desde el 2013 se llama Alianza e incluye recientemente a Evopoli y al PRI, aunque todavía no hay una orgánica y, obviamente, un nombre común.