La senadora Lily Pérez presentó este jueves su renuncia a Renovación Nacional (RN) a través de una carta que será leída en la sede de la Cámara Alta en Santiago.
"RN dejó de ser el partido en el cual se pueden desarrollar ideas y en el que se respetaba la convivencia de las ideas divergentes", señaló la parlamentaria.
En ese sentido, Pérez sostuvo que dentro de la colectividad "ser diferente se convierte en antagonismo" y agregó que ha reinado la intolerancia, clasismo, el personalismo y el temor al liderazgo de las mujeres.
Agregó que durante el gobierno de Sebastián Piñera, RN estaba destinado a ser el mayor apoyo, pero al contrario "se dedicaron a socavar su funcionamiento".
"Se me hace imposible seguir integrando este partido", indicó tras exponer que perdieron el centro y acusó que el poder pasó a ser un "fin en sí mismo".
La parlamentaria se mostró visiblemente emocionada al poner fin a los 25 años de militancia y aseguró que su renuncia responde a "una decisión de vida".
Con la decisión de hoy, Pérez optó por seguir los pasos de sus colegas Karla Rubilar, Pedro Browne y Joaquín Godoy. Anteriormente, el senador Antonio Horvath también había abandonado la formación.
Los diputados electos y ex militantes del partido liderado por Carlos Larraín oficializaron su salida ante el Servicio Electoral (Servel) este lunes y anunciaron la creación del movimiento Amplitud, que podría convertirse en un nuevo partido.
La renuncia de una histórica como Lily Pérez agudiza la crisis al interior del partido de la Alianza, ya que se prevé que en marzo, una vez terminado el gobierno de Sebastián Piñera, algunos de los actuales ministros también optarán por dejar su militancia y no hay claridad sobre el futuro del mandatario.