Destacando una jornada tranquila de votación, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, se refirió a la posibilidad de que la participación sea finalmente menos de la esperada.
"Supongamos que se mantuvo igual o pudo disminuir", partió diciendo en La Moneda, horas después de que en la mañana apostara por cerca de un millón de votantes más que en las Elecciones Municipales del 2008.
En ese escenario, señaló, se anotaría como "una materia pendiente para los candidatos y un mensaje para todos los que postulan a un cargo de representación popular a que generen más convocatoria".
"La conclusión de una concurrencia más baja no es quitarle la libertad a los ciudadanos (…). Lo correcto sería que todo los que estamos en política nos apercibamos que tenemos una ciudadanía a la que hay que convocar con mayor inteligencia y mensajes que los hagan motivarse", añadió.
El jefe de gabinete defendió la puesta en marcha de la inscripción automática y voto voluntario, asegurando que al impulsar esa medida "se piensa en la libertad de los chilenos".
Pese a ponerse en el escenario de una alta abstención, el secretario de Estado aclaró que no hay que hacer anticipaciones: "Esperemos que se cuenten los votos", indicó.