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Carlos Cardoen revela cómo creó las bombas de racimo

El ex dueño de la empresa de armamentos, Industrias Cardoen, asegura que lo principal para conseguir el éxito son: Una idea, recursos y mucha pasión.

Mónica Ñancupán

Sábado 23 de marzo de 2013

El empresario chileno y ex dueño de la empresa armamentística chilena, Industrias Cardoen, Carlos Cardoen, conversó con Carlos Lavín de cómo se gestó la invención de las bombas de racimo, cómo consiguió el éxito y en qué está hoy.

Sus estudios de ingeniería civil en minas, un MBA en administración y sobre todo su doctorado en metalúrgica cursados en EEUU y la experiencia que adquirió al trabajar con el premio Nobel Melvin Cook, fueron según el propio Cardoen, sus bases para pasar de ser un exitoso trabajador a un ilustre empresario chileno.  

"Unaidea, recursos y pasión" son según Cardoen los tres ingredientes para lograr o generar una actividad productiva.

El empresario dice que el principal elemento para conseguir el éxito en una actividad son las ganas, la pasión que se siente por lo que se hace, ya que los recursos se pueden tener o pedirse, pero las pasiones hay que tenerlas.

Cardoen recuerda que comenzó a incursionar en la construcción de armamento militar, debido la promulgación de la enmienda Kennedy dictada por EEUU en contra de Chile. La enmienda prohibía la venta de armas a nuestro país.

Fue en ese entonces cuando el Ejército chileno llamó a varios industriales a participar en la producción de armamento, justo en los ochenta cuando se asomaba un conflicto bélico con Argentina.

La experiencia de Cardoen en la producción de material explosivo para minas, sus conocimientos y una solicitud hecha por el general Matthei, quien le encargó fabricar unasbombas para mantener la cabeza baja del enemigo, lo llevaron a construir la bomba PJ, la que luego derivaría en las bombas de racimo.

El invento lo llevó entrar de lleno en armas de aviación y a encumbrarse y a ser reconocido mundialmente. Tanto que luego comenzaría a exportar armas a Irak.

Hoy, el creador de las bombas de racimo se dedica al turismo vitivinícola, con su hotel, ruta del vino y Museo de Colchagua.