El año 1998 el chileno Mario Moure decidió ingresar a la industria del lujo, al más asequible para la mayoría de las personas, el de los perfumes.
El fundador de la Casa Mouré Perfumería, recuerda que llegó a este sector después de que un amigo le pidió que lo ayudara a buscar un distribuidor para sus marcas en Chile y, a pesar que nunca se planteó ser empresario, estudio el caso y terminó presentando con una amiga francesa un proyecto para convertirse en distribuidores de perfumes.
El primer problema que enfrentó fue la crisis económica que enfrentaba el país en esa época y que como eran muy jóvenes y no tenían el capital suficiente. Por eso debió vender su casa, su auto y todos sus bienes para lanzarse con esta actividad.
Afortunadamente ha sido tal el éxito de su emprendimiento, que luego de unos año la empresa terminó por instalarse en Chile, algo que no le jugó en contra ya que se asociaron y Moure continúa siendo el distribuidor oficial de marcas en la zona franca de iquique.
Si bien acepta que los tres primeros años fueron muy difíciles debido a que el lujo era un concepto nuevo en chile y el retail, no le fue tan complicado consolidarse porque "el perfume es el lujo que todo el mundo puede comprar".
Respecto a los principales problemas que enfrenta la industria dice que son dos: uno, el relleno de frascos, que fue un y dos,el mercado gris o paralelo, que es el que se surte de productos en el exterior como productos perdidos en la Aduana o robos.