Un estudio publicado por la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) ha señalado que los jubilados chilenos están recibiendo pensiones bajas. Es decir, la tasa de reemplazo -comparación de la primera pensión con su último año de sueldo- es de un 52% en el caso de los hombres y 42% en el caso de las mujeres.
Para debatir sobre este tema estuvo en el panel Nicolás Starck, Gerente General de Ciedess (Corporación de Investigación, Estudio y Desarrollo de la Seguridad Social). El experto explica que esto se debe a la tasa en la que han crecido las remuneraciones en el último tiempo, mientras que la pensión considera todos los sueldo anteriores. Por lo tanto, la comparación que se hace se ve afectada.
"El ahorro de las personas depende de los salarios y la frecuencia con la que uno cotiza", asegura el especialista. Además, explica que el ahorro que determina las pensiones se debería hace de forma sistemática. El problema esta en que la frecuencia que debería bordear un 90-100%, es de entre un 60 y 70%.
Por cada año que se anticipa la jubilación, la pensión cae un 8%. Mientras que por cada año que se retrasa, el cotizante incrementa su pensión en el mismo porcentaje. Además afectan las llamadas "lagunas previsionales" (cuando se deja de imponer) y el mayor número de años que viven los chilenos en relación la misma cantidad de años trabajados antiguamente.
El presidente de la asociación de AFP, Guillermo Arthur infiere que el estudio publicado por la OCDE es una proyección y considera a todo el espectro de las personas que han cotizado, independiente si lo hicieron por menos de 10 años. Lo que arroja sin duda, un número que afecta el promedio con respecto a la comparación de sus sueldos, y las pensiones que se le pueden entregar con respecto a su ahorro.