Compartir momentos de nuestras vidas es algo común en la actualidad. Muchos lo hacemos con fotos o vídeos de nuestros hijos, pero tal vez no somos conscientes del peligro que esto significa y que puede derivar en situaciones tan graves como la pornografía infantil.

El cuarto capítulo de "#Viral: Luces y sombras de la web" intentará ilustrarnos sobre quienes pueden estar al otro de la pantalla consumiendo las imágenes de nuestros niños e incluso hablando con ellos.

Pero ¿cómo los podemos proteger de estos "perversos en línea"?

La Unicef alerta de la facilidad con que los agresores se acercan a los niños, tanto en ambientes abiertos como desde Internet.

La Fundación Alia2 trabaja para proteger los derechos de los menores de edad en la web. Con ese objetivo han creado un decálogo para fomentar la seguridad.

Estos son algunos de los consejos:

1. Si algo no está bien en la vida real, tampoco en Internet.

2. Nunca dar datos a desconocidos. Antes de compartir información, evaluar el tipo de información que se va a pasar.

3. No acudir en solitario a un encuentro con una persona conocida por Internet.

4. No permitas actitudes que no aceptarías en la vida real.

5. Ignora o bloquea a quien te haga sentir incómodo.

6. No uses el nombre real como nickname.

7. Avisa a un adulto si se detecta una situación de acoso por Internet.

8. Almacena las conversaciones para que puedan ser usadas como prueba ante una denuncia de ciberacoso.

9. Los padres deben conocer las páginas y herramientas que visita el menor.

10. Hablar del tema, conocer las nuevas tecnologías y la educación son los mejores filtros en la web.

¿Qué pasa con las fotos?

Los expertos recomiendan no publicar las fotos de nuestros hijos en redes sociales por el peligro al morphing; es decir, un montaje fotográfico que combina imágenes sacadas de la web (como las que colgamos de nuestros niños) sin permiso del propietario y otras pornográficas.

Pero además, algunas redes comparten la propiedad de la foto, por lo que no sólo nos pertenece a nosotros. E incluso esa imagen podrá ser vista por desconocidos que tienen acceso a nuestro perfil.

Y sobre todo piensa, ¿le gustaría a tu hijo que mostraras esas imágenes? ¿Le gustará que esa fotografía haya sido publicada (y por ende, pertenezca en parte a una red social) en el futuro?

Para compartir con la familia te dejamos la Guía de Violencia Sexual en Internet que realizó la organización española Pantalla Amigas.