Según la revista Forbes, entre los YouTubers más famosos (y por tanto, los que más cobran) se encuentran Felix Kjellberg, un joven sueco de 25 años que tiene más de 44 millones de suscriptores y cuyas ganancias superaron los 12 millones de dólares en 2014.

Él lideraba el ranking de ganancias en 2015, seguido del canal Smosh, de los estadounidenses Anthony Padilla e Ian Hecox, y Fine Brothers, de los hermanos Benny y Rafi Fine, compatriotas de los anteriores.

En la lista no está el afamado "Hola, soy Germán", pero su éxito es digno de mención. Germán Garmendia, recibiría hasta 900 millones de pesos anuales por su canal en YouTube "Juega Germán".

Pero, ¿de verdad se puede vivir de un canal de YouTube?

Según estadísticas de la red social, existen mil millones de cuentas. Desde marzo del año 2014, la cantidad de personas que ven contenido de YouTube crece un 40% anual.

Los ingresos, por su parte, aumentan un 50% anual, desde hace tres años.

Según el diario El Mundo, un YouTuber gana aproximadamente un euro (776 pesos) por cada mil reproducciones. La recaudación es mayor si se incorporan marcas en sus publicaciones.

Sin embargo, según datos de Google España del año pasado publicados por el diario El País, 1.000 personas en todo el mundo ganan al menos 100.000 dólares al año a través de los vídeos subidos y un millón de canales gana dinero con su material. O sea, de los mil millones de cuentas existentes solo el 0,1% tiene ingresos (sin saber cuánto).

¿Qué canales de YouTube son los más vistos?

Según los datos oficiales de la red, el target principal va de los 18 a los 49 años, aunque los usuarios de entre 13 y 17 años son muy activos. Entre los contenidos más consumidos están la música, los tutoriales y los vídeos de cocina, según un estudio de la empresa Divimov recogido por el diario El País.

Si está pensando en convertirse en uno de ellos, tengan en cuenta que necesitará una dosis de creatividad e ingenio, al menos es un elemento común entre los más famosos. Pero también debe poner atención al contenido para no repetir algo que ya existe (y ojo, que hay mucho).

Prácticamente, en Internet se encuentra la solución para todo y el éxito de canales como WikiHow corroboran la demanda de estos contenidos explicativos.

Además, el efecto de "desinhibición onlice" descrito por el psicólogo John Suler potencia su crecimiento. Gracias a la invisibilidad de la web, nos sentimos más protegidos y nos atrevemos a realizar preguntas que no las formularíamos cara a cara, lo más probable, por vergüenza.

Entonces, ¿se puede ser YouTuber de profesión?

Quizás sea pronto para responder esta pregunta, aunque ya están empezando a surgir las primeras "escuelas para YouTubers". No son universidades ni escuelas como tal, sino organizaciones donde rostros destacados en la web comparten sus conocimientos.

Si se ha quedado con ganas de saber más sobre el éxito de los YouTubers y los vídeos tutoriales, los invitamos a ver este domingo un nuevo capítulo de #Viral, dentro de 24Horas Central.