Como ya es costumbre, todos los años antes de que empiece el invierno, se invita a embarazadas, enfermos crónicos, adultos mayores y niños de 6 meses a vacunarse contra la influenza, pero este año la campaña tiene algo distinto.
Los funcionarios del área de la salud, profesores, personas que trabajan con aves, o con cerdos, son grupos que deben vacunarse. El resto de la comunidad también puede hacerlo, pero estos deberán pagar.
La meta para este año en la región de Magallanes es que se vacune un total aproximado de 55.000 personas, a diferencia del año pasado que sólo fueron 41 mil.