Se utiliza en el combate armado. Es capaz de cobrar varias vidas de un solo tiro.
No cualquiera puede acceder a él, sin embargo fue el hallazgo que hizo un hombre mientras pescaba.
Un hallazgo que tuvo su primer capítulo en el mar, historia que siguió en el Obispado, lugar donde de manera anónima un hombre dejó este lanzacohetes.
La Fiscalía militar en paralelo a la PDI realizarán los peritajes para descubrir a quién pertenece esta letal arma y cómo fue a dar en medio del Estrecho de Magallanes.