El SAG instalatá 110 mil confusores sexuales de la polilla del racimo de la vid (lobesia botrana) en la zona urbana de Chillán y Chillán viejo, para intentar controlar la proliferación de este insecto, cuyas larvas son perjudiciales para las uvas, cerezos, arándanos y otros frutos estacionales.
La capital de Ñuble concentra el 98% de las capturas de estos insectos realizados por el SAG, lo que tendría directa relación con la costumbre chillaneja de mantener parrones de sombra en las casas.