El último pie de cueca, los anticuchos, empanadas, pajaritos, asados y los infaltables terremotos pasaran al recuerdo como parte de las fiestas más largas de este siglo. Fueron cinco días de festejos acompañados por el buen tiempo, aunque en la culmine de la fiesta la lluvia se hizo presente en la región del Bio bío.
Pese a la lluvia, este miércoles 19 de septiembre los asistentes a las ramadas techadas cumplieron con el último día de celebraciones en distintas fondas y ramadas en las comunas del Gran Concepción. Los balances de ventas fueron positivos, aunque a diferencia de los que imaginaban, los feriados no jugaron tan a favor de los ramaderos.
La gente dosificó sus días y también el dinero, pese a ello el ánimo no decayó y tanto asistentes como comerciantes se sintieron conformes con lo vivido en este mes de la patria.