Miles de personas afectadas sin poder llegar a sus trabajos, al doctor o a los colegios son algunas de las consecuencias que dejó una multitudinaria protesta de pescadores industriales y los trabajadores de las plantas procesadoras de Jibia de la Región del Biobío. Reclaman por un acuerdo que prohibiría la captura de Jibia con la pesca de arrastre, una medida que aseguran, los dejará de brazos cruzados. En señal de protesta se tomaron los puentes Llacolén y Juan Pablo Segundo por más de una hora. Una manifestación que luego se trasladó al frontis de la Intendencia, donde terminó con 12 detenidos.