Fueuna extensa jornada de movilización que incluyó una singular protesta a casi100 metros de altura que para algunos obtuvo los resultados esperados.
Las44 familias que pedían ser erradicadas negociaron en forma individual conEndesa para conseguir la compra de sus terrenos. Todos salieron contentos.
Perolos pescadores y algueras no sellaron el acuerdo. Piden a Endesa unaindemnización de 250 millones de pesos para cada una de las 749 familias queviven de los productos que extraen del mar en esa zona.
Parala próxima semana quedó fijada la mesa de negociaciones que podría terminar enacuerdo o en u nuevo conflicto en torno a Bocamina 2.