Comer con frecuencia alimentos fritos podría producir mayor riesgo de sufrir cáncer de próstata, por lo menos así lo afirma un estudio realizado por investigadores de Fred Hutchinson Cancer Research Center de Seattle en Estados Unidos.
La investigación confirma estudios anteriores, donde ya se había sugerido que consumir estos alimentos cocidos a altas temperaturas podría aumentar el riesgo de padecer la enfermedad, sin embargo, este estudio es el primero que examina la adición de las frituras.
Expertos señalan que al calentarse el aceite aparecen compuestos potencialmente cancerígenos, como la acrilamida, los hidrocarburos policíclicos aromáticos, el aldehído, las aminas heterocíclicas y la acroleína. Estos compuestos tóxicos se ven aumentados mucho más con la reutilización del aceite.
Durante el estudio se analizaron datos de 1.549 hombres diagnosticados con cáncer de próstata. Los hombres llenaron un cuestionario donde explicaron que comían en forma habitual.
Según explica Janet L. Stanford, autora del estudio, los hombres que comían frituras una vez a la semana tenían un riesgo mayor de padecer la enfermedad, comparados con aquellos que sólo lo consumían una vez al mes.
Los participantes que comían una o más veces a la semana papas fritas, pescados frito y pollo tenían un riesgo cercano al 37% de sufrir la enfermedad.
"La relación entre el cáncer de próstata y los alimentos fritos parecía limitarse al nivel más alto de consumo definido en el estudio, como más de una vez a la semana lo que sugiere que el consumo regular de alimentos fritos confiere un riesgo particular para el desarrollo del cáncer de próstata", afirmó la autora del estudio.
El consumo semanal de estos alimentos también se asocian con un riesgo mucho mayor de padecer un tipo de cáncer de próstata más agresivo.