Irvin Caplan, de 55 años, es un hombre británico que en 2012 quedó tetrapléjico producto de un accidente en bicicleta que le causó la fractura de tres vértebras de su columna.
Tras el infortunado accidente Caplan tuvo que aprender a vivir dependiendo de una silla de ruedas para moverse.
Sin embargo, hace unos días quiso darle a su hija el mejor regalo que podía en el día de su matrimonio: se puso de pie por primera vez en dos años.
Es que la empresa Rex Bionics, a la cual el mismo Caplan había conocido en una feria tecnológica, le prestó un traje robótico de 97 mil libras esterlinas (más de $91 millones) para que pudiera volver a caminar brevemente en el día más importante de la vida de su hija.
De hecho, el emocionado padre leyó un discurso mientras se encontraba de pie, provocando la sorpresa y emoción en los asistentes en el evento familiar.