Se llama Yves Rossy, pero es más conocido como "Jetman".

Este ex piloto suizo logró este martes una arriesgada proeza, al volar, gracias a un reactor a chorro, junto a un bombardero B-17.

El vuelo fue posible gracias a un traje especial jet pack, cuyas alas y motor le permiten elevarse y realizar vuelos prolongados y estables con una velocidad de hasta 300 km/h y alcanzar una altura de 12.000 pies (más de 3.500 metros).

El dispositivo ha sido construido por el propio Rossy, pero no cuenta con un sistema de despegue ni de aterrizaje. Para iniciar su vuelo, debe saltar desde otra aeronave y accionar las alas, mientras que para aterrizar utiliza un paracaídas.

Este aventurero está realizando sus primeros vuelos públicos en los Estados Unidos con este sorprendente traje. Cientos de personas acudieron a la exhibición pública en el evento AirVenture en Oshkosh, Wisconsin, para ver al aventurero suizo cruzar el cielo al lado de este avión.

Rossy fue durante muchos años piloto de cazas y capitán de una aerolínea.

"Todos hemos soñado alguna vez con volar como un pájaro. Ahora soy entre humano y ave, sólo que con alas fijas", dijo Rossy.

Tras muchos años de desarrollo y pruebas de los diseños de su traje, realizó su primer vuelo con éxito en 2006, cuando voló durante más de 5 minutos en Bex (Suiza).

"Lo que hago es realmente para compartir, para inspirar a los jóvenes y decir que, aunque algo parece completamente imposible, yo lo estoy haciendo hoy. Con perseverancia, logré mi sueño. Así que eso es quizá lo que pueda decirles a las generaciones más jóvenes, no tienen nada que perder al probar", dijo Rossy.