El clavo que le faltaba al ataúd que sepulta las esperanzas de los fanáticos de Guns N' Roses de ver tocando en vivo a la alineación que registró el clásico disco "Appetite for Destruction" en 1987 lo puso sin vacilaciones el controvertido vocalista Axl Rose, a menos de una semana de la ceremonia que incluirá a la banda en el Salón de la Fama del Rock and Roll.
"¿Alguna posibilidad de una gira de reunión con la alineación completa en el futuro?" pregunta en un video un reportero de TMZ al cantante de 50 años que sale de una cena junto Lana del Rey, artista que según especulaciones de la prensa de farándula estadounidense tendría algún vinculo amoroso con Rose. La respuesta del que junto los guitarristas Slash (a estas alturas su peor enemigo) e Izzy Strandlin es responsable de la autoría de los mayores éxitos del grupo fue lapidaria: "No esta vida".
Luego de que se confirmara el reconocimiento Guns N' Roses como uno de las bandas más influyentes de la historia del rock incluyéndoles en el Rock and Roll Hall of Fame, las especulaciones de una eventual reunión de los miembros originales del grupo: Axl Rose, Slash, Duff McKagan, Izzy Strandlin y Steven Adler, comenzaron a inundar los medios especializados. Sin embargo, Slash fue el primero en poner paños fríos declarando que no lo veía factible por la enemistad que tiene con Rose que llevó a la separación del grupo en 1994; "el me odia a muerte", declaró recientemente a la revista Rolling Stone.
Se cierra así un capitulo más en la historia de una de las agrupaciones más importantes en la historia del rock, que si bien sigue activa con giras alrededor del mundo y ya trabaja en la composición de un nuevo disco que sucederá a "Chinese Democracy" (2008), está lejos de provocar el impacto que alcanzó durante los noventa.