Click acá para ir directamente al contenido

Comienza el juicio por abuso de menores contra el líder de la banda "El Otro Yo"

El músico contactaba a jóvenes entre 13 y 16 años a través de un blog del grupo en el que participaba. De acuerdo a los relatos, las obligaba a tener relaciones sexuales con él.

24Horas.cl TVN

© Instagram

Martes 22 de mayo de 2018

Este jueves comienza el juicio contra Cristian Aldana, líder de la banda "El Otro Yo", quien desde el 22 de diciembre del 2016 se encuentra en prisión preventiva por abuso sexual y corrupción contra menores de edad.

Las denuncias comenzaron cuando Aldana hizo público su apoyo a las presuntas víctimas de abuso por parte de su colega, Miguel del Pópolo, integrante del grupo argentino "La ola que quería ser chau". Sus comentarios desataron la furia de las víctimas de Aldana, lo que motivó las denuncias.

De acuerdo a las denuncias, las víctimas eran fans del cantante y éste las contactaba a través del blog de "El Otro Yo", las que sólo tenían entre 13 y 16 años, y que en su mayoría, no tenían ningún tipo de experiencia sexual.

Las primeras denunciantes fueron tres jóvenes que juntas grabaron un video y lo compartieron en Facebook. Frente a la cámara, relataron las violentas experiencias a las que el cantante las había sometido. Ellas dieron el puntapié para que se sumaran nuevos testimonios y denuncias.

 

Con todos los antecedentes, el juez Roberto Oscar Ponce ordenó la detención del músico. “Sabiendo de su condición de ídolo musical de las víctimas menores de edad y, en aprovechamiento de la adoración que éstas le dispensaban, como así también de su inmadurez sexual, las forzó a mantener relaciones sexuales con él en forma violenta e intempestiva", sostuvo en la resolución de dicho entonces.

Además, agregó que logró manipularlas "para que participaran de orgías sexuales que organizaba con otras menores de edad, como así también las incitó a incorporar a otras niñas a dichas prácticas”.

Ya desde la cárcel, Aldana concedió una entrevista a la revista Rolling Stone, aseguró que estar allí era como estar en el infierno, mientras que desmintió todos los abusos de los cuales es acusado, agregando que “me acerqué a Cristo por medio de la oración y pude recuperar un poco de paz. Hoy le encuentro un especial sentido a la libertad y me aferro al amor de mi familia, a los amigos y a la música”.