Richard Lee Norris pasa demasiado tiempo en hospitales.
Esta afirmación la hizo su madre a la revista GQ, magazine que tiene al hombre que fue trasplantado de cara en su portada.
En 1997 Richard recibió un disparo que le deformó por completo, fue sometido a cirugías para poder volver a comer y respirar con normalidad, esto hasta que el 12 de marzo de 2012 su vida comenzó a cambiar por completo. Pero ahora para bien.
Ese día el cirujano facial Eduardo Rodríguez, operó con éxito por más de 36 horas al joven, tratamiento que le permitió devolverle un rostro y que de paso, lo convirtió en una especie de conejillo de indias para la medicina.
"No creo que vuelva a trabajar y tener una vida normal. Pasa su tiempo en hospitales, todo el mundo lo examina, lo estudia. Un jefe no quiere alguien que estará ausente el 99 por ciento de su tiempo", dice Sandra Norris, madre de Richard quien no se queja pero que tampoco quiere que su hijo pase toda su vida en hospitales, sólo quiere para el una vida más normal.
A pesar de eso Richard se siente normal, se ve normal. Según la publicación tiene miedo a que su cuerpo rechace la nueva cara, pero debe seguir adelante. En su casa los espejos ya fueron descubiertos y el dice que cuando se mira "veo a Richard Lee".
"Todos los días me despierto miedo: ¿es éste el día? (el del rechazo) El día que me vuelva a un estado de rechazo que vaya a ser tan malo que los doctores no puedan cambiarlo", afirma Lee Norris.