"Ella sabía a chocolate", reza en parte el monumento al amor que inauguró una cadena de tiendas en Chicago, con motivo de recordar el primer beso que le dio el actual presindente de los Estados Unidos, Barack Obama, a la que se transformaría en su mujer, Michelle Robinson.
Haciendo honor al sentimiento más poderoso del mundo, el amor, los Obama tendrán en esta calle de Chicago, en el costado de un muro de color marrón donde antes existía una heladería, una placa con su fotografía y una leyenda que cuenta cómo ocurrió el mágico encuentro entre el abogado y su mentora.
En el barrio Hyde Park colocaron una placa de granito de casi 1.400 kilos con el texto: “En este lugar el presidente, Barack Obama, besó por primera vez a Michelle Obama”, un método comercial que le ha traído grandes dividendos a los locatarios.
El encuentro en cuestión, ocurrió en 1989, donde la heladería Baskin-Robbins, fue el punto de encuentro entre el joven abogado, Barack Obama y su colega Michelle Robinson, los que tendrán en octubre próximo su aniversario de bodas número 20.