Como un "delito racista" investiga la policía británica el caso de una carta enviada al príncipe Harry de Inglaterra y a su futura esposa, Meghan Markle, la cual contenía un polvo blanco parecido al ántrax y un mensaje de "odio".
"Está siendo tratado como un delito racista. El asunto está siendo investigado por agentes del comando de antiterrorismo de la Policía Metropolitana", señaló un portavoz de Scotland Yard, en declaraciones reproducidas por el diario El País.
El paquete sospechoso arribó el pasado 12 de febrero al palacio de Kensington, donde reside la pareja junto a los duques de Cambridge, William y Kate Middleton, y sus hijos George y Charlotte, donde fue interceptado por funcionarios que se lo entregaron a la policía.
"Se analizó la sustancia y se confirmó que no era sospechosa. Los agentes investigan también un indicio de comunicación maliciosa en relación con el mismo paquete", informó Scotland Yard. Esto en relación al mensaje racista que habría contenido el escrito en contra de la actriz estadounidense, quien es hija de una mujer afroamericana y un hombre blanco de ascendencia europea.
Ahora la policía inglesa busca esclarecer si el envío del sobre tiene relación con el paquete de las mismas características remitido la semana pasada a la oficina parlamentaria de la ministra del Interior, Amber Rudd, en el Palacio de Westminster. Y también con el entregado el mismo 12 de febrero a la esposa de Donald Trump Jr., Vannesa Trump, quien debió ser hospitalizada tras abrir una carta que contenía un polvo blanco, el cual horas más tarde se comprobó que no era peligroso.
La investigación continúa abierta y aún no se han producido detenciones.