Atrás quedaron los tiempos en que bastaba con decir "te amo" para convencer a la pareja que eso era así.
Ahora una singular moda ha llegado a Chile. Demostrar el amor eterno instalando candados que llevan inscritos los nombres de los integrantes de la pareja.
Esta costumbre nació en España, luego del éxito de la película local "Tengo ganas de ti". En la cinta, se observa a una pareja que se jura el amor eterno y, para demostrarlo, instala un candado en un puente y lanza la llave al río.
Al tiempo, esta costumbre se esparció por toda Europa y varios son los puentes que cuentan con los llamados "candados del amor".
En nuestro país, en plena Providencia el puente Racamalac, más conocido como Condell, ya cuenta con estos objetos.
Uno de las parejas que llegaron al lugar fue la integrada por Daniela y Franco, quienes para celebrar sus tres años de pololeo optaron por declararse fidelidad mediante el singular acto.
Según el sociólogo Mauro Basaure, esta moda demuestra que los jóvenes evaden los ritos tradicionales como el matrimonio.
Todo indica que esta forma de declararse el amor seguirá aumentando. De hecho, son más de 500 candados los que cuelgan del puente Condell, mientras que cientos de llaves se han lanzado al río Mapocho
