La prisión es uno de los lugares donde nadie querría estar. Vivir con personas potencialmente violentas, encerradas en un espacio limitado, sin comodidades básicas como comida y baños dignos, puede alterar el comportamiento y aumentar la violencia.
Y aunque en las cárceles del mundo no se admiten ningún tipo de arma que pueda atentar contra la vida de los reos, dentro de estos escalofriantes lugares hay personas realmente creativas que elaboran sus propios métodos de defensas.
Aquí te mostramos algunos de las particulares armas carcelarias:
Hoja de Vidrio
Cuchillo hecho de una espiga larga de vidrio reforzado con alambre y huesos de pollo, atados con cinta utilizada para la identificación de los reos.
Falsa pistola
Hecha de un inyector de grasa, madera, goma y cinta. El preso a quien se le sustrajo el arma pensaba usarla para realizar una fuga.
Cepillo filoso
Cepillo de plástico con cuatro cuchillas insertadas en los dientes, unidos con cordones de zapatos.
Guante
Consiste en un guante más pequeño dentro de uno más grande, con tachuelas de tapicería afiladas entre las capas con puntas filosas. Posteriormente, se cose.
Pistola
Se construyó mediante la soldadura de dos tubos utilizados para los barriles de basura.
Hoja de doble filo
Un palo de madera transformado con hojillas de afeitar en ambos lados. Cinco grandes se encuentran en un lado, seis pequeñas en el otro.
Crucifijo
Hecho de madera y de un cuchillo robado en la cocina, colgado en uno de las celdas de los reos.
Escopeta
Esta arma es una de las más increíbles, ya que el reo utilizó una carga eléctrica para encender el polvo y disparar proyectiles improvisados, entre ellos vidrio.