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Subastan el auto blindado del mítico Al Capone

El Cadillac tiene como precio inicial de la subasta los módicos 250 millones de pesos.

Francisco Guerrero

Lunes 16 de julio de 2012

Un auto blindado podía hacer la diferencia entre la vida y la muerte en el Chicago de los años 20, sobre todo si eres el gángster más temido de los Estados Unidos. Esta era una de las características del mítico, y aún amado por muchos, Alphonse Gabriel Capone, más conocido como Al Capone o 'Caracortada'.

Tal era su necesidad de cuidarse la espalda de otros mafiosos y de la propia policía, que Capone utilizaba un bello Cadillac 341 con un motor V8, pero con una gran y especial característica,  un blindaje a prueba de balas que lo hacía uno de los más exclusivos de esos años.

Este bello automóvil, que contaba con una sirena y radio de la policía para interceptar las comunicaciones que buscaban incautar alcohol durante la 'Ley seca', será subastado el próximo 28 de julio en la ciudad de Plymouth, Michigan, por una suma no menor a los 250 millones de pesos chilenos, precio inicial para comenzar la subasta.

Un auto fantástico

Tal era el nivel de protección que requería Capone, que todos los vidrios de su Cadillac contaban con una pulgada de espesor para detener las balas, con orificios que permitían a las ametralladoras disparar sus ráfagas de balas hacia cualquiera de los dos lados de la calle. Además, se sumaban los orificios en el piso, por donde podían lanzarse clavos, aceite y humo para despistar a la policía o a los otros mafiosos.

La potencia del auto era tal, que le permitía correr a gran velocidad con los 1.300 kilos extra de blindaje que poseía, blindaje conformado por planchas de acero forrado en amianto distribuidas en los paneles laterales. El radiador contaba con una protección extra, y el maletero en la parte posterior del vehículo era en realidad un tanque de combustible adicional con capacidad para 150 litros, muy necesario, debido a que con sus casi cuatro toneladas de peso total, el consumo de combustible del vehículo se disparaba.

Tan perfecta llegó a ser su armado, que incluso fue usado posteriormente a la muerte de Capone en 1947, por el presidente norteamericano Franklin Roosvelt para su protección personal.