Cuando faltaban 10 minutos para las tres de la madrugada y la temperatura en Viña del Mar sólo alcanzaba los 12 grados, el artista mexicano Emmanuel salió al escenario de la Quinta Vergara.
"Corazón de Melao" sonó tras un extenso ritmo de la banda del azteca, canción que dio paso a sólo éxitos sobre el escenario.
"Pobre Diablo", "Quiero dormir cansado", "Detenedla Ya" fueron las canciones que calentaron las gargantas de los valientes que esperaron al mexicano, los que sabían que la noche terminaría en alto con un número probado. Emmanuel no defraudó.
Quince años lejos de Viña del Mar no se notaron más allá de una entrada con la voz rasgada, tal vez producto del frío o de la larga espera para un artista de su talla, sin embargo, una Quinta con poca merma de público supo reaccionar, darle ánimo y agradecer el cariño.
"Gracias por tanto amor", dijo el dueño de "Todo se derrumbó" en respuesta al aplauso cerrado, y les aseguró que "voy a cantar una sola canción nueva para no aburrirlos", para dar paso a "Ella", single de su disco 'Inédito'.
"Bella Señora" continuó con un show enérgico de un artista de 59 años, más de 35 de ellos de carrera artística, los que se notaron en el escenario con un manejo de los tiempos, de su voz apoyándose cuando fue necesario en los coros y descansando cuando lo necesitaba.
Faltaba quien tocara el piano para la siguiente canción y apareció en escena el primer invitado de la noche. Alexander Acha apareció en el escenario para cantar "Sólo" a dúo con Emmanuel, su padre, "espero ganarme su cariño tal como se lo ha ganado mi padre", dijo el artista.
"Sentirme Vivo" revitalizó la noche y cerró el primer bloque de presentación con una Gaviota de Plata pedida por el público desde los primeros temas.
Antes de "La Chica de Humo" voló de inmediato la Gaviota de Oro, en parte pedida por el artista y entregada como un salvavidas por los animadores de cara al horario de término de este show, el que fácilmente podría extenderse dos horas y que aún no completaba la primera.
"La Séptima Luna", "Toda la Vida" y arreglos más contemporáneos hicieron bailar al público, el que quedó con ganas de más cuando la transmisión televisiva cortó y el mexicano Emmanuel abandonó el escenario sin regresar. Una hora y diez minutos de show alcanzó a estar el azteca sobre el escenario.
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