Delirio total despertó Miley Cyrus en los fanáticos que llegaron al Movistar Arena, la noche de este miércoles, para ser parte de la sección latinoamericana de su "Bangerz Tour".
Los gritos y la larga espera -la noche del martes algunos seguidores acamparon en el Parque O'Higgins- dieron paso a un show que comenzó a las 21 horas y que se extendió aproximadamente por 100 minutos.
La exchica Disney no decepcionó y sobre el escenario desplegó todos los elementos que marcaron el paso de esta polémica gira por otros países: sensuales movimientos, constantes cambios de ropa (a lo menos cuatro) y una interacción única con sus fieles fanáticos marcaron la noche.
"Bangerz" marcó un comienzo explosivo, mientras que una chaqueta confeccionada por fanáticos y un indio pícaro serán algunos de los souvenirs que la diva se llevará a su casa.
La vorágine también dejó espacio para la emoción, cuando los asistentes le recordaron a Miley a su fallecida mascota, instante que la cantante aprovechó para rendirle un sentido homenaje.
Al final, un concierto que no desentonó -nadie pudo desconocer la calidad vocal de la artista- y cumplió con la cuota de sexualidad y sensualidad necesaria y esperada, luego de los episodios que la estrella protagonizó en el pasado.
Fotos: Agencia Uno.