Tras un cuarto de siglo de silencio frente a las cámaras de TVN, Roberto Carlos habló con Claudio Fariña en una extendida conversación, donde se refirió desde su participación en el Festival de Viña del Mar en 1975, hasta el partido entre Brasil y Alemania.
Según la revista People, el brasileño ha ganado más de 58 millones de dólares durante el último año, a pesar de que hace 17 años no ha grabado material en español.
Roberto Carlos vive en el barrio de Urca en Río de Janeiro, un barrio de clase media acomodada alejado de las habituales lujosas residencias de lo artistas en Leblon.
El artista se ha reconocido durante su historia como un hombre muy católico, que a pesar de haber vivido la pérdida de sus tres mujeres debido al cáncer, asegura no haber perdido su fe, sino que esta se ha vuelto "más realista".
Esta misma fe lo llevó a cantarle al Papa Juan Pablo II en su momento, pero estuvo ausente en el encuentro con el Papa Francisco debido a compromisos previos, a pesar de haber sido contactado por la máxima autoridad de la Iglesia Católica.
Otra ausencia que sorprendió al mundo, fue cuando Roberto Carlos no se presentó en la inauguración del Mundial de la FIFA, donde según asegura entre risas "no me llamaron, no se puede tener todo".
Al referirse a los siete goles sufridos por su selección frente a Alemania, la describe como "Un sufrimiento muy grande, no sé ni como explicar lo que sentí en ese momento".
El artista de 73 años asegura tenerle pánico a la vejez y sus consecuencias, por lo que dice busca retardar el proceso con ejercicio, píldoras y medicina ortomolecular.
A pesar de que no le gusta referirse a la política, asegura que el polémico saludo que le hizo a Augusto Pinochet durante su presentación en el Festival de Viña del Mar de 1975, no fue un gesto político, sino que fue parte de una actitud de educación.
Sin duda un artista histórico para Latinoamérica, que además aprovechó de adelantar que durante el 2015 estaría aterrizando nuevamente en suelo chileno.