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Aterradoras avispas gigantes matan a 28 personas en China

Ataques de la Vespa mandarinia, la avispa más grande y letal del mundo, se han multiplicado. La causa se relacionaría con el cambio climático.

24horas.cl Tvn

Miércoles 2 de octubre de 2013

Veintiocho personas han muerto y centenares han resultado heridas en China en los últimos tres meses por ataques de la Vespa madarinia, la avispa más grande y letal del mundo.

La mayoría de los ataques se han producido en zonas rurales y boscosas del sur de Shaanxi,  una provincia en la región noroeste de China, donde viven más de 37 millones de personas.

La Vespa mandarinia y sus subespecies, como el avispón gigante japonés, son los tiranosaurios Rex del mundo  insectos capaces de matar y comer presas más grandes y feroces, como la mantis religiosa.

La avispa, que llega a medir seis centímetros de largo y más de ocho con las alas extendidas, habita en las zonas tropicales y templadas de Asia Oriental.  

Es descrita como una verdadera "máquina de matar”, pequeña y muy eficiente, y su aguijón –de casi un centímetro- bombea veneno con una enzima capaz de disolver la carne.

Las víctimas de múltiples picaduras a menudo sufren un shock anafilático y daño renal. En dichos casos, recibir tratamiento de urgencia es vital.

La avispa puede volar a unos 25 kilómetros por hora y es conocida por perseguir a las personas por cientos de metros.

 

En el último tiempo los reportes de ataques se han multiplicado, según la prensa local.

Expertos creen que el gran calor, posiblemente causado por cambio climático, puede haber contribuido a la multiplicación de estos agresivos insectos.

Según reportes de CNN, un hombre  describió los ataques de la siguiente manera: "Cuanto más corras, más querrán perseguirte”.  La víctima terminó internada en un hospital con sus riñones comprometidos y orinando líquido del color de la soja.

Otro ataque ocurrió en una escuela rural y afectó a 30 personas, 23  de ellas estudiantes que alcanzaron a esconderse debajo de las mesas mientras un profesor trataba de expulsar a los insectos de la sala.  El hombre perdió el conocimiento y algunos estudiantes sufrieron picaduras en la cabeza , manos y  pies.

Hasta ahora las autoridades contabilizan 28 personas fallecidas, 18 de ellas sólo en la localidad de Ankang.

En esa ciudad se produjo un fenómeno similar entre los años 2002 y 2005, con 36 fallecidos y 715 heridos en cuatro años.