Un experimento dejó expuestas las facilidades que tendría un presunto secuestrador de niños para concretar su objetivo.
Un hombre se acerca a otro adulto y le consulta sobre si su hijo se iría con un desconocido.
Para sorpresa de los padres, la utilización de un perro como “carnada” termina por convencer a los menores de partir de la mano con su “nuevo amigo” para ir a conocer otros canes.
“Más de 700 niños son secuestrados al día y más de un cuarto de un millón al año ¿Están sus hijos a salvo?”, sostuvo el autor del registro.
El video cuenta con más de cuatro millones de visitas en YouTube.