Jennifer Jones fue diagnosticada con fibrosis quística a los 29 años de edad, un trastorno genético que reduce la expectativa de vida a 37 años y que es detectado normalmente en la infancia.
A fines de 2017, la mujer que ahora tiene 40 años, fue sometida a un trasplante de pulmón en la Clínica Mayo de Minessota, luego de que la enfermedad redujera la actividad de esos órganos a menos de un 10%.
Su novio, Robert Ronnenberg, grabó el impactante momento en que le sacan los equipos de respiración asistida y que Jones da el primer respiro por sí misma en años.
Jennifer sufrió de problemas respiratorios durante toda su infancia, problemas que los doctores atribuyeron al asma o alergias, por lo que nunca recibió el tratamiento adecuado para su enfermedad.
Tras años con dificultades para respirar, Jones se convirtió en madre y los doctores descubrieron que su hijo era portador de fibrosis quística, con lo que la mujer se sometió a un estudio genético que le diagnosticó esta enfermedad.
Con el paso de los años el tratamiento y la oxigenoterapia no fueron suficientes y la condición de Jennifer empeoró, por lo que debió ser sometida a un transplante.
Tras su primer respiro declaró a la cadena de televisión ABC6 que "me sentí como si estuviera volando. Creí que estaba allá arriba y no podía tomar un respiro lo suficientemente hondo, fue increíble".