Los visitantes del Coex Aquiarium de Seúl (Corea del Sur) fueron testigos de una espeluznante escena protagonizada por un tiburón caníbal. Se trata de una hembra de 8 años de edad y 2,2 metros de largo, quien atacó de manera implacable a un macho más pequeño, y después se paseó tranquilamente con su "trofeo" frente a los visitantes.
Según información de medios locales, la lucha habría sido originada por motivos territoriales. Unas 20 horas después de la acción, el tiburón hembra tenía aún la cola de su víctima asomando, todo ante la mirada de los visitantes que recorrían los túneles del acuario.
La cola del macho permanecerá allí durante unos cuatro o cinco días, según explicaron los expertos, hasta que la hembra la regurgite incapaz de digerir a su presa. En el acuario, que nunca había registrado un incidente similar, explicaron que no tiene que ver con el género de los contendientes.