Es extraño. Muy extraño. Y puede llegar a ser grande. Muy grande.
Se trata del pez remo, uno de esos seres marinos que parece encontrarse más cómodo en los libros de criaturas mitológicas que en la realidad.
Pero existe, como atestiguan los cuerpos sin vida que se encuentran cada cierto tiempo en playas e, incluso, los ejemplares enfermos que aparecen a veces flotando en el mar, como este de 7 metros capturado en 1996 por la Marina de EE.UU.
Sin embargo, un grupo de científicos de la Universidad Estatal de Luisiana (EE.UU.) han logrado grabarlo ahora en su hábitat natural, a unos 460 metros de profundidad en el Golfo de México.
En total hubo cuatro avistamientos entre 2008 y 2011 y pudo ser grabado gracias a un robot equipado con una cámara, según publica la revista Journal of Fish Biology.
Se calcula que este animal puede llegar a medir 17 metros de largo y pesar hasta 270 kilogramos, y habita en las profundidades oceánicas extremas -hasta 3.300 metros bajo la superficie-, según informa el portal de noticias RT.