Las manchas llegan cuando menos lo esperas. Un día sin previo aviso se instalan en la cara, el escote o las manos y arruinan toda la uniformidad de tu piel. En algunos casos no se es responsable de que aparezcan porque nacemos con ellas, como el caso de los nevus melanocíticos, pero en otros casos, somos las culpables de su aparición.
Aunque los dermatólogos señalan al sol como el principal responsable de las hiperpigmentaciones, también hay otros factores determinantes. Los cambios hormonales, como los embarazos o la menopausia, son un caldo de cultivo para la proliferación de manchas denominadas melasma o cloasma que, por cierto, son las más rebeldes de borrar.
La nicotina, cafeína y el estrés también son algunos de los factores que producen estas imperfecciones tan incomodas a la hora de elegir un lindo vestido.
¿Cómo borrarlas? No es una tarea fácil, requiere de mucha dedicación y constancia, pero los resultados siempre son satisfactorios.
Si vas a tomar sol tumbada en tu mejor toalla, recuerda que debes usar un bloqueador solar factor 50, así tu piel se protege de los dañinos daños del sol y rayos UV.
También existe una infinidad de terapias que puedes consultar con tu dermatólogo particular, entre ellas la Mesoterapia.
Consiste en tres péptidos bio-miméticos, inéditos, que emulan las funciones de los receptores celulares, responsables de regular la producción de melanina, para atenuar las manchas ya existentes. Además, previene la formación de nuevos focos de concentración excesiva de pigmento desde el origen.
Otra solución es el Láser, específicamente desarrollado para eliminar las pigmentaciones de la piel. En una o dos sesiones, dependiendo de cada caso, se eliminan las manchas de la edad, como los léntigos seniles o actínicos. El láser destruye las células que tienen un exceso de pigmento, pero sin dañar el tejido circundante.
Por último son los Doble peeling. Está recomendado para eliminar el melasma (también llamado paño de embarazada), esas manchas con forma de mapa que aparecen habitualmente en pómulos, frente y labio superior y que son las más rebeldes para eliminar.