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Logran reproducción de Ranita de Darwin en cautiverio

Con este logro el proyecto ya está en condiciones de comenzar la etapa de reintroducción de ranitas en su medio natural.

Erwin Acevedo

Sábado 22 de diciembre de 2012

Cuarenta y cinco nuevos ejemplares de la Ranita de Darwin (Rhinoderma darwinii) han nacido, en lo que va de este mes, en la estación de biología de que dispone la Universidad de Concepción (UdeC) para la reproducción de este pequeño anfibio fuera de su ambiente natural, elevando la población total a 200 individuos.

Esta es la cuarta camada que se genera al amparo de un proyecto pionero de conservación en Chile, iniciado en 2009 por  grupo de investigadores del Laboratorio de Herpetología de la UdeC  en colaboración con el Zoológico de Leipzig, y que tiene como objetivo reintroducir a esta especie en peligro de extinción en su medio natural.

Un paso importante en este sentido se ha registrado también este mes, ya que por primera vez se están reproduciendo individuos nacidos en la estación, hijos de los 11 reproductores originales (colectados en Coñaripe) con que partió el proyecto.

Este hecho, de acuerdo al director del  proyecto, el docente del Departamento de Zoología, Juan Carlos Ortiz, era un punto crítico para el éxito de la investigación.

La reproducción de los individuos originales  –la primera meta de la iniciativa- y la mantención de sus hijos presentaron dificultades, pero era necesario probar la factibilidad de que las crías de cautiverio alcanzaran la madurez sexual y que, a su vez, fueran aptas para reproducirse.

El doctor Ortiz señala que existen tres parejas de la primera generación nacida en cautiverio que darán a luz próximamente, esto porque  los machos ya están incubando los huevos en su boca, de acuerdo al particular sistema de crianza de esta especie. 

Ortiz recuerda que luego que la hembra deposita los huevos en el suelo para ser fertilizados, el macho se queda cerca de ellos para recogerlos en su boca, donde los mantiene (en un saco espacial)  hasta que se transforman en una rana completamente formada.

Las nuevas crías podrían nacer en enero o en febrero, aunque –advierte-  es difícil establecer un plazo con certeza para ello, dado que el período de incubación  es muy variable: puede ir de dos hasta siete meses.

Con este logro, afirma el investigador, el proyecto ya está en condiciones de comenzar la etapa de reintroducción de ranitas en su medio natural

“En este caso pensamos que lo mejor será seleccionar una parte de los primeros reproductores, más una cantidad complementaria de los nacidos en cautiverio y que ya están en período reproductivo”, afirmó Ortiz.

El lugar elegido es la zona de Coñaripe y la fecha estimada, septiembre del próximo año.

Mientras los investigadores preparan lo que será esté gran hito –en Chile no se ha realizado ninguna experiencia previa en reintroducción de anfibios-  también avanzan en establecer sistemas para poder monitorear la inserción de las ranitas en la naturaleza.

Ortiz adelantó que usarán un método basado en elastómero, “una marca que se pone bajo la piel y con la que se puede hacer combinación de colores, y que permiten seguirlos sin problemas”.

Fuente: UdeC