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Consejos para pagar los estudios sin sobreendeudarse

Las becas son la mejor opción, pero los cupos son limitados. De ahí que los expertos apunten a los créditos con aval del Estado, y desaconsejen los préstamos genéricos que pueden acarrear pésimas consecuencias.

24Horas.cl TVN

Martes 3 de noviembre de 2015

Si los planes del gobierno se cumplen, para 2016 el 50% de los alumnos más vulnerables estudiarán gratis. En total, unos 240.000 jóvenes se verán beneficiados.

Otros aún tendrán que buscar financiamiento. Para ellos les resumimos aquí cuáles son las mejores opciones para pagar los estudios sin terminar cubierto en deudas.

Sin duda, lo ideal son las becas, "ya que a diferencia de un crédito no debes devolver estos recursos al egresar o al titularse", indican Ricardo Ibáñez de Defensa Deudores.

 

Pero "tienen requisitos exigentes y los cupos son limitados", reconoce el profesor de Finanzas de la Facultad de Ingeniería de la UDP, Branco Matijevic. De ahí que los créditos universitarios se conviertan en una de las opciones más recurrentes.

Los más atractivos y ventajosos son los Créditos con Aval del Estado (CAE) y el Fondo Solidario del Crédito Universitario, porque "tienen tasas bastante atractivas", señala Matijevic, lo que las sitúa en mejor posición "que un banco u otra entidad financiera".

 

Estos préstamos tienen una tasa anual de 2%, se entrega en UTM o UF y se tramita a través de las universidades. Cuentan con respaldo estatal y se devuelven en plazos de 10 a 20 años, con montos que van entre un 5% y 10% de los ingresos anuales una vez que se ha ingresado al mercado laboral.

 

Obviamente, también se pueden pedir préstamos genéricos a los bancos y destinar ese dinero a pagar los estudios "pero no se recomienda por sus intereses", señala Ibáñez, que reitera esta idea aún con más fuerza "jamás tomar un crédito de consumo".

Si lo hiciera, fíjese "en la tasa de interés, en los seguros asociados, en las tasas que cobran por morosidad y en las cláusulas de prepago (es decir, si quieres cancelar el crédito por anticipado)", indica el académico de la UDP.

En cuanto a los plazos, "debe ser posible pagarlo con el salario cuando uno sea profesional", advierte Matijevic; por lo que si la fecha de vencimiento es corta, se arriesga no poder pagarlo. Tampoco se recomienda un plazo demasiado largo, "para no estar pagando el crédito toda la vida", indica el profesor.