El proyecto "Ley +56" no ha quedado exento de polémicas. Y es que un grupo transversal de diputados presentó dicha iniciativa que busca prohibir que los call centers operen desde el extranjero.
En concreto, la moción punta a reducir delitos, facilitar la comunicación y generar más empleo en el país: "El rol del operador es un rol que se puede automarizar y reducir con ello el impacto económico del canal telefónico, entonces creo que merece una doble mirada de cuáles son las posibles reacciones de los incumbentes en esto".
Al respecto, las cifras señalan que 30 mil trabajadores se emplean en call centers. Sin embargo, el 41% de los ingresos de estas compañías proviene del extranjero, particularmente de Perú y Colombia.
Por ello, la iniciativa legal busca establecer multas de hasta $40 millones, a quienes subcontraten este servicio en el extranjero. La idea agrada a los sindicatos, quienes acusan que la llamada "ley anti spam" ha golpeado el empleo del sector.
El proyecto figura en tabla para este martes 30 de octubre en la Comisión de Economía de la Cámara de Diputadas y Diputados.
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