Durante una fiscalización, la autoridad sanitaria de Antofagasta detectó que en la Administradora de Fondos de Cesantía (AFC) de Calama se encontraban trabajando tres funcionarios que debían cumplir cuarentena preventiva.
Hasta el lugar llegó personal de la Seremi de Salud regional que se percató de la falta de la AFC, puesto que previamente se había indicado a seis trabajadores que debían cumplir aislamiento preventivo luego de que se detectara un caso positivo de COVID-19 en la sucursal.
Ante lo sucedido, la Seremi prohibió el funcionamiento del recinto ubicado en calle Abaroa y cursó dos sumarios: uno a la AFC y otro a su jefe de sucursal, en calidad de representante legal.
La seremi de Salud de la región, Rossana Díaz, indicó en conferencia de prensa que "cuando hay una indicación de la autoridad sanitaria, la empresa tienen que acatar. Si a una empresa se le dice que tiene que mandar seis funcionarios a la casa, y manda tres, el sumario es carísimo porque está atentando contra la salud de las personas”.
Además, en la fiscalización se encontró que la AFP no cumplía con protocolos sanitarios, como registros de limpieza y sanitización; distanciamiento en comedor del personal, ni certificado de sanitización de alguna empresa autorizada.
En la comuna de Calama se han realizado 313 fiscalizaciones a empresas, en las cuales se han cursado 27 sumarios y 19 prohibiciones de funcionamiento.